La enfermedad de Chagas (ECha), resultado de la infección por el Trypanosoma cruzi, afecta varias poblaciones de las
zonas rurales de Suramérica y América Central. En los últimos años la enfermedad ha cobrado importancia epidemiológica no sólo porque se ha incrementado la detección de casos, sino por la presencia, en la infección crónica, de cardiopatía, patología de considerable gravedad clínica y cuya aparición aumenta el riesgo de incapacidad y reducción de la expectativa de vida.